Como todos los días, se hizo un café y leyó la prensa. El coronavirus arrecia en el mundo, pero Jaime no está seguro de que se trate de un virus tan peligroso. Insiste en su tesis: Es un complot de los chinos para destruir la economía mundial. A Jaime no le interesa la lógica que sustenta su argumento. Él solo siente que los chinos son malos y maquinadores.
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Pensé que ya nada me haría reír en mucho tiempo pero está corta historia logro ese milagro moría de risa ..saber que mantienes el ingenio intacto en estos momentos de incertidumbre como el que vive Venezuela es digno de admiración un abrazo Enviado desde Yahoo Mail con Android
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Gracias. Es realmente un placer leerlo.
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Genial!!! No he parado de reirme. Me alegro el día jajajjaja…
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Saludos cordiales.
Excelente narración; aunque sólo he logrado abrir éste archivo.
Mil gracias, le deseo todo el éxito del mundo.
Morela Sánchez C.
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